sábado, 29 de agosto de 2009

Cactilio vive.

Sí. Mucha gente tiene en la torre de su pc cables fosforitos, ventiladores de colores psicodélicos, cajas translúcidas o cualquier diseño sorprendente y agresivo. Yo tenía, como buena aspirante a funcionaria que soy, un cactus al lado del monitor. Si os fijais no hay ningún administrativo de la Seguridad Social o de Hacienda que se precie que no tenga un cactus al lado del pc. Aún no tenía el empleo, pero ya tenía mi cactus... No era siempre el mismo. Por alguna razón, no les gustaba mi cuarto y se morían uno tras otro. Hasta que llegó él. Era especial. No era redondito, tenía forma de pepino en miniatura. Sí, siempre fue extraño, pero él sobrevivió y creció a mi lado mucho tiempo. Cada día era más grande y su forma se tornaba más curiosa. Era una especie de pequeño monstruo de los cactus. Ya me preguntaba si debería transplantarlo de su pequeña maceta a una más grande. Pero hace unos días, al volver de la Feria, noté un olor extraño en mi cuarto... Entonces le descubrí desmayado y partido en su macetita. Corrí hacia él. Le dije: "¿pero qué te ha pasado?". Y él me contestó con su silencio misterioso, mostrando su interior hueco, como si hubiera dado a luz a un minúsculo alien. En aquel momento a mi madre sólo se le ocurrió volver a plantarlo más profundo en la tierra, para ver si de alguna manera podía sobrevivir. Hasta que hace dos días, al amanecer, me desperté y miré hacia su rincón habitual. Me acerqué. La macetita estaba vacía y la ventana abierta. Como única pista, habían quedado unas cuantas púas esparcidas alrededor. Así que ya sabes, si ves un cactus mutante corriendo y remoloneando por ahí, dile que le espero en casa con los brazos abiertos.

1 comentario:

  1. En casa, también hemos tenido alguna cactácea que otra. Lo recuerdo bien porque sin darme cuenta, muchas veces me he pinchado con ellas Q__Q .

    Si veo alguno por la calle corriendo, te avisaré ^^

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